Entrevista del Mes:
“…En este momento sólo siento que se vulnera y reprime a la Cultura Mapuche”
Lunita Celeste Calquín, honra el significado de su apellido mapuche: Águila Grande y con vuelo firme y poderoso; se abre paso por la escena del arte, desde su corazón, trabajo y legado ancestral. Muralista y con sed de música. Ha realizado importantes exposiciones y su vida gira en un entorno de constante creación y expresión. Con una personalidad versátil pasa de ganarse la vida con su oficio de Pedagogía, a entregarse con fervor en sus pasiones artísticas. Empatica y de gran humor. Rancagüina. Nacida en Santiago; se reconoce provinciana de tomo y lomo y sin edad por catalogar.
¿Cómo fue tu proceso en el arte, tus comienzos?
Mis padres se conocieron en la Universidad, estudiando Licenciatura en Arte. Entre amor, complicidad, técnicas mixtas y pasión se les ocurrió llamarme Luna Celeste y de bebé me llevaban con ellos a sus clases. ¡Creo que desde ahí partió todo!
¿ Intrusa de cabra chica?
Siempre observándolo todo; era tranquila de niña, (en mi ¡adolescencia liberé toda esa energía contenida!). Me gustaba dibujar historietas (mi padre tiene ese material).
Eres Muralista, entre otras facetas. Cuéntanos de ti y de cómo te fuiste gestando.
En el área artística me siento muy aprendiz, sigo experimentando, investigando, observando y arriesgándome.
Estudié Pedagogía en Informática Educativa. Carrera extraña a la que aposté en su momento pues me pareció atractiva e innovadora. Ha resultado ser buen salvavidas en el área profesional y he sabido complementarla con mi pasión por el arte y la música.
Y claro, la base de todo son mis padres; que desde el vientre siempre me hablaron de pinceles, pintura, pintores e historias de esfuerzo y sacrificio en esta ruta por la creación y el amor por el color.
¿Cuándo realizaste tu primer mural?
No lo he verificado con las fuentes pero tengo el recuerdo de haber pintado junto a mis padres en el “Hogar Don Guanella” de Rancagua cuando tenía unos 6 años, Hogar don Guanella acogía a niños con problemas familiares (lo que actualmente sería el SENAME, Servicio Nacional de Menores, en Chile).
Todas esas fotos las tiene mi padre en algunas cajas apiladas en su taller de Vichuquén, VII región. En el verano me arrancaré a desenterrar tesoros por allá.
¿Cómo se gestó Trafkintu Cultural?
Mi apellido Calquín significa “Águila Grande” en mapudungun entonces siempre me he sentido ligada al pueblo mapuche y he integrado de alguna manera temáticas de culturas originarias a mi trabajo.
En este camino he conocido a gente muy bonita y el proyecto “Trafkintu Cultural” germina gracias a una amiga que tiene un Banco de Semillas en Copequén.
Se nos ocurrió hacer un “Trafkintu”, intercambio cultural entre Rancagua y Copequén realizando un gran mural colaborativo pintando conceptos relacionados a la cultura Mapuche. Pintamos junto a niños, jóvenes, amigos, familia y también mi padre, Roberto Calquín. Esta iniciativa concluyó con una hermosa ceremonia y manjares mapuche preparados por la lamgen Olguita Llanquileo, que me ha acompañado también en otros proyectos.
lamgen Olguita Llanquileo
El arte posee una semántica multívoca; para ti, ¿cuáles son los cruces más significativos?
tía Nitza
tía Nitza
Al tener una musa inspiradora como Violeta Parra; una quiere intentarlo ¡y sin temor!
Y más cercano tengo el ejemplo y referente de mi tía Nitza Carreño, quién de manera sorpresiva e inesperada abandonó su cuerpo terrenal este año dejando un legado cultural enorme y mucha inspiración.
En ellas vive la música, la poesía, las artes visuales, la necesidad de explotar todos los sentidos. ¡Muchas aristas significativas!
Mi tía fue dirigente social en aquellos años de censura y horror que jamás quisiéramos repetir. Militaba en el Partido Comunista. Trabajó en el Sernam, en la CUT, fundó una agrupación llamada “Alma Viva” para apoyar a personas que viven con VIH y formó parte de la iglesia Mormona en Rancagua.
¡Las hizo todas! Una gran líder.
Arte y política reunidos por antonomasia, ¿tú que piensas? ¿El arte es política?
Claro que sí, el arte es un puente sólido y efectivo (no como los que se construyen hoy en día) para transmitir todo tipo de mensajes: políticos, sociales, feministas, animalistas, publicitarios, etc. Cada artista decide la motivación con la cual mueve su pincel.
En Chile hay muchas brigadas, colectivos y agrupaciones que han aportado grandes colores al destape de las múltiples injusticias que vivimos a diario. Son unos imprescindibles.
En lo personal voy colaborando en las luchas que me identifican utilizando distintos elementos, por ejemplo se me ocurrieron los “Boletos Sociales”, que voy dejando en las micros con mensajes subliminales y coloridos.
“Huellas Originarias, Tributo a nuestros ancestros” ¿Qué significó para ti? cómo sientes que se pulsó la Exposición. ¿Estás conforme?
Aparte de aportar a la difusión de nuestra cultura. ¿Qué políticas de desarrollo para la cultura y arte de nuestros pueblos originarios te gustaría ver en nuestro país?
Huellas Originarias ha sido un proyecto importantísimo para mí, debido a la gran deuda que tenemos con nuestros pueblos originarios. Los verdaderos dueños de casa. Ha sido un pequeño grano de arena para la reivindicación de nuestras culturas ancestrales, pero realizado con mucho corazón, responsabilidad, lectura, investigación y cariño.
Fue muy intenso este parto; en el trayecto tuve importantes pruebas: partió a la eternidad el gatito que me acompañó durante todo el proceso del proyecto y también mi tía Nitza.
Quedé muy muy agotada; pero ya estoy recuperando fuerzas para seguir itinerando por los variados rincones del país con la muestra. Tuvo una gran recepción por los asistentes.
Fue lindo compartir con niños de distintos colegios y con personas que vinieron de otras regiones a ver la exposición. Realicé talleres de serigrafía con motivos precolombinos y murales colaborativos junto a niños y adultos para enriquecer la experiencia.
Aún son muy escasas las políticas culturales relacionadas a los pueblos originarios, no hay iniciativas permanentes.
En general, la ingratitud hacia nuestras culturas ancestrales es tremenda que no sabría por dónde empezar a enumerar.
Junto a Eduardo Bravo, Artesano, luthier y mejor amigo, quien realizó las enmarcaciones de algunas de sus creaciones.
¿Se idealiza, romantiza y folklórica la cultura mapuche…? Cuál es la diferencia crees tú?
La verdad es que, en este momento, sólo siento que se vulnera y reprime a la cultura mapuche.
¿Participas de círculos femeninos? ¿Cómo conecta tu arte ahí? Cuál es la diferencia, para ti, entre feminismo y Feminidad Sagrada?
No he participado en círculos femeninos aunque que varias amigas me han invitado, pero tarde o temprano lo experimentaré.
2016 especialmente ha sido un año de explosión feminista, entre todas nos protegemos, expandiendo nuestros sentidos con el objetivo de poner término a esta cultura machista impuesta por siglos. No daremos ningún paso atrás. Ya despiertas; vamos enseñando a las futuras generaciones el respeto que simplemente nos merecemos.
Feminidad Sagrada la entiendo como nuestra conexión con el mundo interno, aprender a conocerse, amarse y desarrollar todas nuestras capacidades, como valiosas mujeres que somos. Feminismo siento que es el potente movimiento social que nos une.
¿Conociste a Anita Tijoux? o sólo te agradeció, ¿establecieron vínculos?
Desde hace muchos años sigo las letras y música de Ana Tijoux, por lo que ameritaba ilustrarla. Fue una pintura en técnica mixta, acuarela y boletos de micro de distintos lugares de Chile.
Una amiga en común le mostró mi ilustración y ella me escribió agradeciéndome. Justo en ese tiempo se presentaba en Rancagua así que nos juntamos. Le di una copia (el original lo tengo en mi taller ) y ella me regaló una polera.
Me agregó a sus contactos de Facebook entonces constantemente tengo noticias de ella. Ha sido una de las historias bonitas y memorables de esta ruta artística.
Si tuvieras la oportunidad de reunirte con un artista vivo o muerto, ¿cuál sería, que le sugerirías o preguntarías?
Me gustaría conocer a Hayao Miyazaki; pero de la emoción no me saldría ninguna palabra.
Ilustración creada por Lunita de Miyazaki; manejando el gatobus y todos los personajes de sus películas, realizado cuando el artista cumplió 75 años.
Fondart? ¿Qué le falta?
Iniciativas permanentes, apoyo constante; compromiso con el seguimiento y la difusión de los proyectos. Encuentro muy triste que sea un “concurso” y estar “compitiendo” con mis pares, con muchos de mis amigos.
¿Qué se viene para el 2017?
Tengo la misión de componer la música de un documental relacionado a mi tía Nitza Carreño. Ella antes de partir me comentó de este proyecto y de su director, me motivaba a que lo conociera…y así fue, en el lugar más inesperado, en su velorio.
Espero seguir viajando junto a “Huellas Originarias” y que florezcan muchos proyectos que tengo en mente.
¿Un mensaje a la Machi Francisca?
Marichiweu: ¡diez veces venceremos!
Lunita junto a sus gatos: Ikkis abajo hembra y Jiji arriba macho; supervisando sus bocetos.