El Rescate de los Ritos en los Ciclos de la Tierra

Por Sybila Oráculo

Sacerdotisa de Avalon, Medium, Astrologa, Periodista

@sybilaoraculo.cl

En la era del Holismo y la proliferación de las terapias alternativas; y pensamos que estamos ultra conectados porque hacemos reiki, la calcomanía del Om viaja en los autos y el orientalismo entra fuerte en el mercado. El ego espiritual ataca para generar una ansiedad por saber, obtener diplomas y conocimiento técnico e intelectual.

Todos anhelan maestrías. Sin embargo, la realidad nos muestra que apenas recién, se está procesando la importancia de sincronizar el cuerpo, mente, alma, con el ciclo de la Tierra y el Cosmos.

Nos muestra temas que tienen que ver con dejarse tiempo para sintonizar. Que aún ignoramos mucho. Escuchamos solo dogmas, libros, materia intelectual y observamos poco; caminamos poco, poco tomamos aire, poco contemplamos, poco entendemos sobre el ecosistema. Saber comer es más importante que saber tener amuletos. Que la magia está afuera en lo que te rodea y no incrustada necesariamente en objetos de adoración o dependencia.

Dicen de las personas que celebramos ciclos de la tierra; que somos adoradores del demonio e iconoclastia; pero no es así. Quien no experimenta, no puede comprender cómo esto se vivencia.

Ni lo diplomas, ni el adiestramiento sirven tanto como la práctica y sintonización activa y vivencial, pero cuesta dejar tiempo a la práctica. Diría que el problema de fondo, es el tiempo. Dejarse el tiempo. Las Artes mágicas son enemigas de lo express por la simple y sencilla razón que deben ser vivenciadas en ciclos.

Enfermedad versus conexión natural

Hoy, vemos que muchas enfermedades comienzan con depresiones para luego somatizar en cánceres y enfermedades crónicas que se afianzan poco a poco en las células, debido a la falta de algo tan simple como absorber conscientemente sol y luna.

Dichas depresiones comienzan con pequeñas crisis de pánico que luego van aumentando; muchas de ellas detonadas por una profunda tristeza de sentirse perdido, vacío, desfasado del sistema imperante.

Pero en principio no es enfermedad aquello que ataca a tu cuerpo. Es un aviso. El cuerpo te habla de lo que está mal. Sostener ciertos hábitos y obligaciones explotan en estas secuelas cancerígenas; el autoflagelarse por cumplir un patrón social.

Tu cuerpo ya no bebe sol ni menos hay espacio para que poetices con tomar aire por la tarde, cuando es el momento de sintonizar con la luna, porque generalmente, a las seis de la tarde, aun te hacen trabajar;  necesitamos comenzar a ser impregnados por la luna para activar la melatonina.

Estos astros matrices, son indispensables para la vida hormonal que secreta nuestro comando pineal. Proceso básico para nuestra ingeniería de vida y la fluidez de la kundalini. No hemos sincronizado los calendarios desde una perspectiva vital, inteligente y dinámica.

Todo comienza por comprender cómo funcionan los ciclos de la tierra, pero no sólo saberlo sirve, es importante incorporarlo como hábito y existencia consciente en nuestro espacio vital: mente, hogar, cosmovisión; vivenciar el permanente viaje de la vida en su tránsito natural día con día y noche con noche, mes con mes. Los ocho ciclos del año, más uno, el noveno, que es metafísico; algo parecido al día fuera del tiempo.

Observa tu calendario. ¿Cuándo celebramos navidad, año nuevo, el llamado Halloween? todo ese gregoriano calendario establecido según el mercadeo está absolutamente fuera de lugar respecto de cada fecha y ciclo de la tierra. Según nuestro hemisferio, en Chile recién vamos a tener nuestro año nuevo, ahora, ¡el 21 de junio! No es porque lo celebren los mapuches.

Es; porque nosotros estamos aquí en un país que está en el hemisferio Sur.

¿Cuál es su característica? Es un ciclo que viene preparando el retorno de la germinación cuando todo ha muerto en el pasado ciclo llamado Samhain, por las tradiciones europeas en la magia; que en los pueblos mesoamericanos se llama la Fiesta de los Muertos.

Si uno lo piensa, es insólito seguir una moda sin comprender que toda esa parafernalia es la conexión de la tierra no de la marca de los dulces que venden en el supermercado, y todo porque un calendario gregoriano cristiano te lo impone, tú le crees y lo sigues. Así no se tiene idea lo que se está haciendo. No hay felicidad, sólo el cumplimiento del deber con el niño al que no sabes explicarle nada porque tú tampoco lo entiendes. Consumo vacío de una tradición manipulada al interés de un dogma.

Lo que estamos vivenciando en este cambio de Era; es la caída de dichos dogmas, para dar paso a la espiritualidad libre.

Si el ciclo se viviera el cuerpo lo sentiría. Si tan sólo por una vez en la vida prestáramos atención a la sabiduría y cosmovisión de nuestros pueblos nación originaria; más allá del snob folklórico; si comprendiéramos que esa cosmovisión es para sentirla, vivirla y asimilarla como un estado natural de la vida, no sólo estaríamos mejor de salud si no que comulgaríamos mejor con la Pachamama, diosa madre tierra. Ella fecunda con el poder de los ciclos de la luna, semana tras semana, mes con mes; gracias a todo lo absorbido por el sol Padre, lo que bien asimilado y cumpliendo el ciclo de un año astrológico dará frutos y riquezas, según mi experiencia de vida. Y por su parte a estas comunidades decirles que la medicina tampoco se apropia.

Si no tengo idea por qué hago lo que hago; no puedo vivenciar y sentir el ciclo, otoño, invierno primavera; no puedo comprender la tierra y su latir. Qué es y desde donde nace todo lo que te alimenta.

Para los curanderos, brujos, personas altamente sensibles; de todo el mundo, existe una asimilación de las tradicionales celebraciones de algo que se conoce como los Hijos del Mundo Antiguo. Cuando la divinidad, el dios, era la dualidad, dios-diosa; y se veneraba en todo lo viviente y sintiente. Pero es un concepto que tienen que ver con los ciclos, la naturaleza, no adoración de dogmas, ideas ni personas. Por lo demás adorar es una palabra limitada porque lo que se hace es ritualizar la salud, compenetrándote con el ciclo.

Sabemos que cada cultura posee esa misma veneración con otros nombres y correspondencias, por eso en tu tierra acércate a ella y siente desde lo primigenio.

Ciclo nuevo en el Hemisferio sur

Algunas aclaraciones con respecto a lo que llaman AÑO NUEVO

Yule, yultide le llaman en tierras lejanas indo europeas. Las rescatamos porque representan la celebracion de los cambios naturales que otorgan el equilibrio a la vida y ocurre por la rotación de la tierra alrededor del sol. Sus efectos se ven en la semilla. Gracias a estos cambios de la Cruz cardinal de aries, cáncer, libra y capricornio, existe cosecha. Muy fuerte en escandinavia y Alemania. Durante 12 días. Simbólicamente 12 días de descanso especial. Y esto a su vez proviene del calenda hebreo de meditar 12 días sobre lo que anhelas que sea tu año venidero. El 12 en kabbalah es abundancia y gestación de cambio para ser fértil y próspero.

El sol que ya había cumplido con entregarnos cosecha. Debe descansar, es necesario para tener energía. Pará darle ese pase de descanso; simbólicamente se quemaba un tronco representando el año que se iba y se vestía y adornaba, otro nuevo para esperar el que vendría. Esa es una manera. Existen variables. El tronco debía quemarse y mantener esa hoguera encendida durante toda la noche pues se pensaba que si no era toda la Noche vendrían malos augures. Más que todo es mantener la energía viva.

Por tanto; NO es el renacimiento del Sol. Es el descanso del sol.

El sol renacerá el 1 d agosto, en este hemisferio, en Imbolc. La candelaria le llamaron los cristianos que acomodaron todo a su dogma. Viviendo Yule, en el hemisferio sur. Explicamos el proceso de la energía. Ciclo de la energía en que todo comienza a incubarse para dar y abrirse paso a un renacimiento. Pero eso aún no pasa. Ese renacimiento de luz tendrá su primer pulso en Imbolc, y su plenitud en Ostara. Ostara es la real fiesta de los huevos en este hemisferio sur que cae en sept – oct Ahora estamos en un proceso de dejarlo dormir para renacer. Pero aún no ha renacido…

En estas tierras poseen diferente nombre según culturas. Las brujitas celebramos con sincretismo; porque no es una fiesta que sea tú fiesta. Nadie es original en esto. Es astrológico y astronómico; ciencia y lo simbólico. Es cultural de cada tierra. Original no es. No es mapuche. Es de todo el mundo, del planeta. Lo aclaro porque es increíble. Pero Se piensa que es El año nuevo Mapuche y ni ellos le llaman así.

We tripantu o Wiñoy Tripantu, es la celebración Mapuche, que se realiza en el solsticio de invierno austral (el día más corto del año en el hemisferio sur) entre el 21 y el 24 de junio. Pueblos Andinos y otros también lo celebran y en cada lugar posee su nombre y sus riquezas rituales.

La idea es vivirlo. Para los magos, brujas, es Yule (del nórdico antiguo: Júl) y se celebra cada solsticio de invierno. Hemisferio sur el 21 de junio y 21 de diciembre en el hemisferio norte.

Para los pueblos nórdicos se relaciona con la mitología germana. El Yule originalmente duraba trece días y el cristianismo lo asimiló a la Navidad. Festividad también presente en la cosmovisión andina con el Inti Raymi (en quechua fiesta del sol). Antiguamente llamada Wawa Inti Raymi (fiesta del sol niño). Ceremonia incaica y andina celebrada en honor de Inti (el dios sol) en cada solsticio de invierno. En todos los países ocurre algo similar. En el caso andino, realizan una ceremonia más cargada a la recreación turística que a una oportunidad de que la urbe lo tenga como un feriado festivo serio.

(Eso nos lleva también a una fuerte discusión y por cierto muy seria sobre los feriados calendarios impuestos. Tenemos un calendario gregoriano, de los más inexactos y esclavistas; con puros feriados cristianos)

Lo cierto es que no existe nada tan autóctono en la cultura de un pueblo. Desde el comercio fenicio aquello fue quedando demasiado alejado de la realidad; debido a que cuando se intercambiaba un producto se entrelazaban también las culturas y con ello, el mestizaje y su variedad de matices.

Cuando nos reunimos a celebrar los ciclos de la Tierra; nos damos cuenta que somos Uno con el Todo, y que todo se mezcla que no existe el puritanismo. Los brujos chilenos somos brujos chilenos. Sabemos muchas medicinas, pero estando acá nos conectamos con la naturaleza, los árboles ancestrales del lugar.

Este año nuevo natividad de Yule coincide con el año nuevo Mapuche de nuestro pueblo nación, que también venera sus nativos árboles.

A las reuniones de estos encuentros se les denomina por su ciclo, según su lugar. Si para los europeos es Lammas la fiesta del maíz, acá es la fiesta del choclo. Esta fiesta de Yule tiene su origen en la Escandinavia precristiana. Era algo familiar, con énfasis en germinar la fertilidad y celebrar los solsticios, se continuaba honrando a los ancestros que se habían comenzado a venerar en la fiesta anterior, de Samhain.

(se realizan al aire libre; no en encierro total , ya que debemos vivenciar el elemento y la temporada estacional que no toca )

La mesa o suelo de celebración se preparaba con magnificencia ante la tumba de los parientes fallecidos y se priorizaba la hospitalidad hacia los forasteros. Por ello todo altar de estas tradiciones, es muy grande y hermoso. Es una fiesta tan ecuménica como gozadora y mundana, llena de placeres, porque la divinidad está en todo, y eso es vivir. Te sincronizas con los astros, no es que los adores. Te sincronizas con los colores de vestimentas, las intenciones y las ofrendas. Y como parte del rito se quema el tronco del año anterior, el tronco de Yule. Al final lo que nosotros realizamos es un sincretismo. Actos creativos de celebraciones. Molestamos a todos por igual; tanto a una escuela de Magia purista como al religioso dogmático.

Yule es un Sabbat

El origen del término Sabbat para describir una reunión de brujas; se relaciona con el viejo prejuicio antijudío. Como la religión judía santifica el Sabbat como día de descanso, algunos gobernantes cristianos de la Edad Media buscaron relacionar el descanso prescrito por la religión judía, con la actividad satánica y brujeril. Asociaron, de forma peyorativa, el judaísmo con prácticas demoniacas y acusando a los judíos de adoradores del diablo. Les llaman los adoradores de saturno, en referencia además a las fiestas Saturnales romanas. (recuerda que fue una tribu de origen semita, quienes son los originarios llegados a Roma)

Pero además lo hicieron con los ciclos que celebran las brujas. Error total, ya que tampoco es puramente judío este hábito; si no más antiguo, ya que desde la noche de los días, tomar el descanso para celebrar la cosecha y venerar la semilla, despedir a los muertos celebrar la muerte misma como proceso de transición a otra dimensión y, por ende, el fluir de la vida en los multiversos.  

Es un rito que siempre hemos realizado como humanidad. Hoy, algunos dicen que es «de brujas» celebrar estos Sabbat o esbat (luna), pero la verdad es que es de ignorancia sobre cómo funcionan los ciclos de la tierra. ¿Tiene caso que una religión ande peleando con la gente que rescata este patrimonio? Cuando sus propios calendarios provienen de ahí y sus fiestas religiosas, llevan otros nombres pero es lo mismo?

Qué caso tienen celebrar una convención, consumiéndola en cosas.

No vemos, no sentimos, no tomamos el tiempo para celebrar la vida, los ciclos: dormir sin placer y levantarse sin alegría, vuelven urgente comprender estos Sabbat, es una emergencia espiritual para recuperar la salubridad del alma en acción.

Particularmente, en la Rueda de la Diosa, o Rueda del Año, honramos al pueblo mapuche y nos mezclamos con nuestro mestizaje mundial. Reza un dicho que el hombre blanco buscará la medicina del indígena. Ocurre, que la medicina es la naturaleza y la naturaleza es de todos. Volviendo a las raíces, al círculo. Por ello ese doble racismo que existe de parte de algunos mapuches o cualquier etnia, de sacralizarse como puritano y exclusivo; algo que llevamos en la sangre todos. No es sano tampoco, ni aceptable.

Va siendo tiempo de volver a sintonizar con la paz verdadera dejar de luchar por los linajes. Y sobre todo, gozar al sol, la luna y los astros sin prejuicios. Quizá valorando como lo que son dentro del sistema de la vida, no Dioses…

Ciclos: Rueda del año

Samhain (Última Cosecha, Noche Ancestral, Fiesta de los Muertos, Halloween) – 31 de octubre (1 de mayo en el hemisferio sur).

Yule (Alban Arthan, Solsticio de Invierno) – 21 de diciembre (21 de junio en el hemisferio sur).

Imbolc (Día de Brígida, Candelaria) – 1 de febrero (1 de agosto en el hemisferio sur).

Ostara (Albar Eilir, Equinoccio de Primavera, Festival de los Árboles) – 21 de marzo (21 de septiembre en el hemisferio sur).

Beltane (Día de Mayo) – 1 de mayo (31 de octubre en el hemisferio sur).

Litha (Alban Heruin,Coamhain, Solsticio de Verano) – 21 de junio (21 de diciembre en el hemisferio sur).

Lughnasadh (Lammas, Primera Cosecha, Festival de las Primeras Frutas) – 1 de agosto (1 de febrero en el hemisferio sur).

Mabon (Alban Elfed,Herfest, Segunda Cosecha, Equinoccio de Otoño) – 21 de septiembre (21 de marzo en el hemisferio sur).

Dos invitaciones:

Gratuito; Participa en Rueda de la Diosa Círculos de Avalon, Santiago, wasap dejar tu mensaje +56974775875  (reales interesados , se requiere tiempo y dedicación pues cuando celebramos la rueda nos tomamos el día completo) fancebook: Rueda de la Diosa Círculos de Avalon

Pagado: Te invito a la formación de Runas de las Brujas; donde conocerenos de la Rueda del Año, de manera general, para que la comprendas. Infórmate, será presencial en Puente Alto. @violetaespacio

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s